El proyecto de rehabilitación hotel rural Montseny supuso uno de los mayores retos arquitectónicos abordados por Acento Estudio. Se trataba de intervenir en una masía del siglo XV, profundamente arraigada en el paisaje del Parque Natural del Montnegre, para convertirla en un hotel rural de cuatro estrellas sin perder la esencia de su arquitectura original.

La intervención requirió un profundo estudio estructural, ya que el edificio presentaba patologías propias de su antigüedad. Se reforzaron los muros de piedra y los forjados, y se incorporaron nuevas instalaciones sin alterar la lectura histórica del conjunto. El objetivo era lograr un equilibrio entre autenticidad, confort y eficiencia, respetando el valor patrimonial del inmueble.

El Hotel Cal Batlle se amplió con un nuevo volumen destinado a restaurante y servicios, diseñado con materiales y proporciones coherentes con la masía original. La unión entre ambas construcciones se resolvió con una arquitectura discreta y respetuosa, que permite distinguir lo nuevo de lo existente sin generar rupturas visuales.

En el interior, Acento Estudio apostó por un diseño que combina la textura de los materiales tradicionales –piedra vista, madera maciza y hierro forjado– con acabados contemporáneos. Los espacios conservan su carácter rural pero incorporan una atmósfera cálida, serena y acogedora, propia de un hotel con encanto.

Cada habitación se diseñó para resaltar la relación entre arquitectura y entorno natural, con vistas abiertas al paisaje del Montseny. El resultado es un espacio donde historia y diseño conviven en armonía, ofreciendo al visitante una experiencia de descanso en plena naturaleza.

El proyecto del Hotel Cal Batlle es un ejemplo de cómo Acento Estudio interpreta la rehabilitación arquitectónica: respetar el pasado, adaptarlo al presente y proyectarlo hacia el futuro.

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